La evaluación en telenseñanza es uno de los temas que menos ha sufrido cambios. Hemos podido observar que se han planteado cambios en los roles de docente y discente, pero se suele terminar evaluando a través de los trabajos que los alumnos entregan de forma presencial, o a través de exámenes tradicionales.
No olvidemos que la evaluación no es sólo del alumno, sino también se debe evaluar a los docentes, la calidad de los contenidos, funcionamiento del sistema y el desarrollo del proceso.
4.1 Evaluación del alumno
La evaluación es el análisis de logros que hace el profesor y que le permite comprobar los aprendizajes y formalizar la correspondiente acreditación de los mismos.
Hemos de diferenciar la autoevaluación de la evaluación.
La autoevaluación permite al alumno analizar sus logros de forma autónoma y con ello reconducir, si fuese necesario, su proceso de aprendizaje.
La evaluación puede ser una evaluación formativa (que tiene lugar de forma secuencial a lo largo de un proceso). En un sistema de telenseñanza no sólo ha de centrarse la evaluación del alumno en sus aprendizajes –entendidos como logros y síntomas, sino que es muy importante valorar los procesos de trabajo y en ellos analizar las interacciones.
Acerca de éstas es necesario saber cómo se han desarrollado, con qué objetivo, con qué frecuencia, de qué forma cada alumno ha interactuado con el resto y con los discentes.
Tenemos distintas formas y estrategias posibles para realizar la evaluación del alumno desde una visión más constructivista. Así, podremos utilizar para ello:
• Registros automatizados de participación (que recogen las herramientas telemáticas),
• Herramientas de portafolio en línea,
• Cuestionarios (pruebas objetivas o bien de desarrollo) realizables a través de la red,
• Desarrollo de actividades colaborativas,
• Entregas de informes, prácticas, actividades, trabajos.
4.2 Evaluación del proceso
Hemos de contemplar la evaluación del proceso y la evaluación del sistema.
Respecto a la evaluación del proceso: analiza la coherencia y ajuste de las dimensiones habituales de la planificación del curso (objetivos, contenidos, metodologías, evaluación) Y aspectos específicos de la telenseñanza como la interactividad con los contenidos (instrumental), la interactividad entre los actores (cognitiva), la flexibilidad o la usabilidad.
Evaluación del sistema: Es donde se comprueba la adecuación de las herramientas elegidas, su sencillez de usoy su claridad de la interfaz, la accesibilidad o los problemas técnicos.
Se evalúa si es una experiencia de calidad.
Y no hemos de olvidar, en ningún caso, preguntar al alumno sobre su grado de satisfacción.
·
Es necesaria su opinión para analizar y valoración de la calidad educativa.
· Determina si el curso fue provechoso.
· Satisfactorio, Accesible, Coherente.
· Sirve para hacer ajustes del curso.
4.3 Evaluación del profesorado
En telenseñanza se analiza las funciones de los profesores al igual que las de los tutores, así como la función del tutor es muy importante en un sistema presencial es mucho más importante la función de este mismo en un sistema de telenseñanza.
Si el tutor ejerce bien su Rol esto hará que haya menor índice de abandono y fracasos por parte de los alumnos o discentes.
Por ello, es importante evaluar el trabajo tanto de los profesores como de los tutores para analizar cuáles son sus fallos y para así poder optimizar la enseñanza.
Lo que más hay que tener en cuenta son dos factores importantes como son: La definición y diferenciación de los roles del docente y del tutor (se recomienda que sean personas distintas) y el Número de alumnos (no deben ser tan numerosos entre 20 - 25)